El Club de Lectura «Los Tajos» celebró el Día Internacional del Libro

Con motivo de esta celebración se dio lectura al Manifiesto a favor de la Lectura que cada año publica el Centro Andaluz de las Letras y que en esta ocasión ha sido elaborado por la Catedrática de Literatura Española y escritora, Amelina Correa bajo el título «Enciende una Luz».

El pasado 20 de abril las socias del Club de Lectura «Los Tajos» se reunían en la Biblioteca Municipal para celebrar el Día Internacional del Libro. Entre las actividades llevadas a cabo se realizó la lectura del Manifiesto con motivo de esta conmemoración y a continuación se mantuvo una charla sobre la escritora Cecilia Böhl de Faber más conocida por su seudónimo masculino Fernan Caball, escritora a la que la Consejería de Cultura y de Patrimonio Histórico, a través de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, ha querido dedicar este año el Día Internacional del Libro y que ha sido elegida como autora del año 2022 por el Centro Andaluz de las Letras.

MANIFIESTO DÍA INTERNACIONAL DEL LIBRO (Enciende una luz de Amelina Correa)

Hubo un tiempo, durante mi infancia, en que para mí, cada día, era el Día del Libro. No puedo entender a la niña que fui, ni a la mujer que soy, sin los libros,que son tan parte de mí como mis venas y los latidos de mi corazón. Libros con los que mi niñez construyó los peldaños de una escalera y los huecos de una ventana, mientras entonaba romances antiguos que me vinculaban, sin saberlo,con un ancestral y riquísimo venero. Los libros me permitían ascender hasta la luna de Verne, abrir el cofre del tesoro de Stevenson o imaginarme por un momento a la Jo de Mujercitas.

Los cuentos de hadas, El Guerrero del Antifaz, Enyd Blyton, El Conde Lucanor, Los tres mosqueteros, las Leyendas de Bécquer, con el primer gozoso escalofrío de terror, la mitología clásica que abrió para mí un mundo insospechado.

El libro ha sido escalera, ventana, cofre, consuelo (¿cuántas veces ha llenado nuestras horas convalecientes? Y pienso en autores a quienes su salud obligó aguardar un largo reposo: Aleixandre, Ángel González…), pero también barco que ha posibilitado nuestras huidas y aventuras (y “ruega que tu camino sea largo”,nos enseñó Kavafis en su maravilloso “Ítaca”).

También han sido, sin duda, faro, rayo de luz que alienta, incluso en la noche oscura del alma. En la Alejandría de la Antigüedad coexistieron paradójicamentela más inmensa de las bibliotecas -que hubiera hecho las delicias de Borges-, y un faro que fue considerado maravilla del mundo. El tiempo, la barbarie o el fanatismo arrasaron con ellos.

Ojalá ahora, que volvemos a vivir tiempos convulsos, el libro pueda servir de faro o de consuelo. Y pienso -¡cómo no hacerlo!- en todas esas víctimas de la inicua guerra de Ucrania, arrancadas de sus vidas. A cuántas de ellas un libro podrá servir, al menos, de refugio o de faro ante tanta oscuridad.

Y no quiero olvidar la amargura de ser mujer hoy en Afganistán, abandonado en manos de la cruel intolerancia, donde este curso se ha privado del acceso a los libros a las niñas mayores de doce años, haciendo realidad, un siglo después, lo que Lorca escribió en La casa de Bernarda Alba: “Nacer mujer es el mayor castigo”.

Tampoco lo tuvo fácil, salvando todas las distancias, nuestra Cecilia Böhl de Faber, autora del año en 2022, a quien ser mujer y querer dedicarse a las letras en un siglo hostil como el XIX le costó, por de pronto, tener que proteger su identidad mediante un seudónimo. Pero la literatura puede salvar, y bien lo demuestra una obra de apogeo decimonónico, como Las mil y una noches, donde la inteligente Scherezade conquista literalmente su vida gracias a la narración de cuentos, gran parte de ellos procedentes de ese ancestral y riquísimo venero dela tradición y el folclore popular a que antes me refería. Ese venero, a cuyas aguas precisamente acudirá Fernán Caballero, y del que surgirá el más frondoso de los árboles.

Por eso tú, que ahora atiendes mis palabras, abre un libro y bebe como si saciaras tu sed en una antigua fuente. Lee sus páginas y enciende una luz para intentar que el mundo sea un lugar un poco menos oscuro