15 de octubre, Día Internacional de las Mujeres Rurales

La igualdad de género es un derecho. La realización de este derecho es la mejor oportunidad que existe para afrontar algunos de los desafíos más urgentes de nuestro tiempo, desde la crisis económica y la falta de atención sanitaria hasta el cambio climático, la violencia contra las mujeres y la escalada de los conflictos.

Las mujeres no sólo se ven más seriamente afectadas por estos problemas, sino que tienen ideas y la capacidad de liderazgo para resolverlos. La discriminación de género, que sigue obstaculizando a las mujeres, es también un obstáculo para nuestro mundo.

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), aprobados por los dirigentes mundiales en 2015, propone una hoja de ruta para lograr progreso sostenible que no deje a nadie atrás.

Lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres forma parte integral de cada uno de los 17 ODS. Garantizar el respeto de los derechos de las mujeres y niñas por medio de todos estos objetivos es la única vía para obtener justicia, lograr la inclusión, conseguir economías que beneficien a todas las personas y cuidar nuestro medio ambiente, ahora y en las generaciones venideras.

El campo enfrenta 2022 con denuncias de bajos precios, afectado por la pandemia de la covid y una exigente nueva Política Agraria Común (PAC); problemas que las mujeres rurales suman al de la discriminación por su género y la reivindicación de su papel esencial para la sociedad.

Las responsables de las asociaciones de mujeres rurales pueden provenir de distintos puntos de España o diferentes posicionamientos, pero sus dificultades son básicamente las mismas: dificultades para conciliar familia con trabajo, falta de reconocimiento de su papel en el sector agrario, trabas para acceder a formación y empleo, y la violencia de género.

Este Ayuntamiento de Alhama de Granada se une a las reivindicaciones que se ha publicado desde la Asociaciones de mujeres de distintos ámbitos del mundo rural que reivindica:

  1. Que las mujeres coticen por la actividad agraria y hagan valer sus derechos

La necesidad de que las mujeres coticen por la actividad agraria realizada y que hagan uso de herramientas para hacer valer sus derechos como la titularidad compartida o la participación activa en sociedades y cooperativas, además de reivindicar la contribución femenina en la agricultura.

Con la pandemia la sociedad ha tomado más conciencia de la labor esencial del sector agrario, algo que “de rebote” ha servido para “poner en valor el papel de la mujer rural”, que este año afronta un relieve de la crisis económica y necesita el apoyo de las administraciones y la población.

  1. El desempleo tiene cara de mujer

Desde la Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural (Afammer), , este Día de la Mujer Rural ha de servir para reivindicar el importante papel de las mujeres en el campo y el “largo camino que queda todavía por recorrer” para alcanzar mejores salarios y condiciones laborales.

Afirma que el desempleo “tiene cara de mujer”, especialmente acentuado en esta crisis económica causada por las restricciones para frenar la pandemia, cuando el empleo es el “pilar fundamental” de su independencia económica.

  1. Fin de la brecha digital

La Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (Amfar), pide este 15O el fin de la brecha digital, que afecta de manera directa a las mujeres, ya que en su opinión impulsando la digitalización en el rural se facilita la formación a distancia y el impulso de los negocios, incluso entre restricciones.

Esto influye de manera directa en el combate contra la despoblación “las mujeres son la pieza esencial para fijar la población en las zonas rurales”.

  1. Afectadas por la pandemia

La Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur) destaca que quieren transmitir que “en el mundo rural español existe un compromiso firme para avanzar en igualdad”, ya que la España rural “necesita una revolución” que ha de ir acompañada de mejores condiciones de vida para las mujeres, que además de sufrir el golpe de la pandemia en sus negocios están asumiendo todavía más labores en el hogar por los cierres de servicios.