Fue el pasado martes día 15 en un sencillo acto en el que todos los alumnos reunidos en el patio portaron pancartas con el lema “Un niño es el mundo entero”, mostrando su apoyo a los miles de refugiados que huyen de la guerra.
Daniel Moreno, director del CEIP Cervantes, recordó la actual situación que se está viviendo en Europa con las oleadas de refugiados y cómo debemos sensibilizarnos con estas personas que lo han perdido todo y sólo les queda la esperanza de una vida mejor tras las fronteras.
Tras la intervención del director, Mª Mercedes Entisne, profesora de primaria del centro, dio lectura a una carta de su autoría en recuerdo a los niños fallecidos en el intento de alcanzar un futuro esperanzador.
UN NIÑO ES EL MUNO ENTERO (de Mª Mercedes Entisne Barrientos)
Una plata en verano es el lugar donde la tierra y el mar se reúnen, se abrazan y, guiñándose un ojo cómplice, ofrecen a los niños un hermoso lugar donde jugar.
Los niños en la playa saltan, corren y gritan cuando las olas, sus amigas, los empujan y ellos retadores inocentes, creen que las pueden vencer.
Los niños en la playa se tumban en la orilla para dejarse mecer, y en ese balanceo saborean el ir y venir de la vida, sin que ellos lo lleguen a saber.
Los niños en la playa se hacen fotos, radiante su blanca sonrisa, sobre la piel tostada por el sol.
Los niños en la playa hacen castillos de arena y grandes agujeros. Allí los entierra su hermano, con la cabeza fuera, y después, llenos de arena, salen corriendo hacia el mar.
Los niños de la playa son nuestros hermanos, nuestros hijos, nuestros sobrinos, nuestros primos. Somos nosotros mismos, hace poco o hace mucho, que eso ya da igual.
Dos niños se han quedado, como tantos otros, para siempre en el mar.
Y este cole les dice que siempre los recordará.
Para finalizar, tras la lectura de la carta se soltaron globos blancos que portaban cada uno de los alumnos, simbolizando la paz y con el deseo de que la situación actual se termine.