Tras un proceso de restauración de la Galería del Carmen, mediante el cual ha quedado descubierto un arco y un paño de piedra, original del antiguo claustro del Convento de los Carmelitas Calzados (S XVII), esta magnífica Sala de Exposiciones del Ayuntamiento de Alhama de Granada abrirá nuevamente sus puertas.
Será con la inauguración de la “Exposición de Juan Espejo y Tilla Zúñiga” el próximo viernes 5 de junio a las ocho y media de la tarde, en ella podremos ver una muestra conjunta de óleos del paisaje alhameño y retratos en óleo y carboncillo.
Tras la inauguración, la exposición permanecerá abierta hasta el lunes 15 de junio en horario de 19h a 21h de lunes a sábados.
SOBRE LOS AUTORES (Por Andrés García Maldonado)
JUAN ESPEJO DEL ROSAL
Nació en Alhama y en sus años de juventud, profesionalmente, comenzó a residir en Málaga. Como bien nacido, se siente de ambas tierras, teniendo predilección por La Cala del Moral. Así, su vocación hacia la pintura, cuando se reveló como algo que se lleva desde siempre en las mismísimas entrañas, dedicándose más de lleno cuando llegaron los años del júbilo tras toda una vida de trabajo, se desbordó en un constante volcarser sobre su pueblo natal y su lugar de actuales vivencias a la par. Logra hermanar ambas cosas y, sobre todo, plasmar los rincones y paisajes más bellos y genuinos de ellas. Los que lleva en sus pupilas porque se lo transmite lo mejor de su alma. Sólo con vocación, cariño y limpia dedicación se logra esto, hermanar estas poblaciones en sus cuadros porque ya están para siempre en su corazón.
TILLA ZÚÑIGA LÓPEZ
Nació en Granada, se hizo malagueña, no deja de ser ambas cosas, a la par que se enamora de las ciudades y poblaciones con alma, esas que tienen singularidad en su ser y sentir, como ella dice, como ha pasado con nuestra y ya su Alhama. La siente como suya, la lleva también en su pintura. En esta ocasión, como una hermana más de la tierra, de la que se siente ya parte por recíprocos afectos, ha querido mostrarse antes los alhameños como la pintora de retratos que es. La pintura para ella, como dice, no es su profesión, es bastante más, su vocación, su modo de entrar, con la mayor ternura, en el mágico mundo del los más elevados sentimientos. Mana de ella una profunda inclinación hacia lo bello y, así, cuando pinta siente verdadera emoción, la misma que nos expresa cuando se refiere a los encantos de Alhama.